que no te canalicen,
que no te entuben,
que no te encajen ni te compriman,
que no te hagan tabletas,
que no te metan en una botella,
¡cuidado!. llámame cuando me necesites,
yo soy el poeta hijo de pobres,
padre, tío, primo, hermano carnal y concuñado de los pobres,
de todos, de mi patria y las otras,
de los pobres que viven junto al río,
y de los que en la altura de la vertical cordillera pican piedra,
clavan tablas,
cosen ropa,
cortan leña,
muelen tierra,
y por eso... yo quiero que respiren,
tú eres lo único que tienen,
por eso eres transparente,
para que vean lo que vendrá mañana,
por eso existes, aire,
déjate respirar,
no te encadenes,
no te fíes de nadie que venga en automóvil a examinarte,
déjalos,
ríete de ellos,
vuélales el sombrero,
no aceptes sus proposiciones, .........vamos juntos,
.......................................bailando juntos,
.......................................bailando por el mundo,
.......................................derribando las flores del manzano,
.......................................entrando en las ventanas,
.......................................silbando juntos,
.......................................silbando melodias de ayer y de mañana,
ya vendrá un día en que libertaremos la luz y el agua,
la tierra,
el hombre,
y todo para todos será, como tú eres.
Por eso, ahora, ¡cuidado! y ven conmigo,
nos queda mucho que bailar y cantar,
vamos a lo largo del mar,
a lo alto de los montes,
vamos donde esté floreciendo la nueva primavera
y en un golpe de viento y canto repartamos las flores,
el aroma, los frutos, el aire de mañana.
Hace 20 horas